martes, 18 de marzo de 2025

Casos Clínicos: Paciente varón de 4 años de edad con lesiones ulceradas en dedos de pie.


La Dra. Dalcy Garcia Lino, de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, envía esta imagen con el siguiente texto:



Buenas noches Dr. Saludos cordiales y de antemano gracias por la ayuda con los casos compartidos.

Tengo un paciente de 4 años masculino peso 13kg, talla 100cm. Con cuadro de 2 semanas lesión en piel como se observa en la imagen. Pruriginosa por las noches. Usó betametasona tópico. Por su característica da para pensar en leishmaniasis  cutánea

Zona tropical sin contacto aparente de casos similares sin embargo en nuestra zona vemos casos alejados de esta causa.

Por favor requiero su ayuda con posible dx según clínica

Laboratorios hemograma y pcr en parámetros normales

Saludos desde Santa Cruz – Bolivia

 

 



 


Dra. Dalcy Garcia Lino

Santa Cruz de la Sierra. Bolivia.




Opinión: Se observan lesiones ulceradas en la región dorsal del primero y segundo dedos del pie izquierdo, más grande la del hallux. El segundo dedo asimismo, se ve otra lesión ulcerada en el borde lateral externo del dedo que no parece tener continuidad con la lesión dorsal. Las lesiones ulceradas tienen significativa profundidad, un poco exagerada por sus bordes elevados en forma de rodete. El fondo de las úlceras está cubierto por una superficie granulosa de material fibrinoso de color blanco amarillento. No se observan lesiones satélites en la imagen mostrada. El aspecto de las lesiones, y el hecho de que no existan antecedentes traumáticos, ni picaduras de araña, ni ningún otro que  puedan orientar hacia alguna etiología en especial, que la lesión sea aparentemente indolora, pero pruriginosa,  me llevan a sospechar en  primer término: LEISHMANIASIS CUTÁNEA. Otros diagnósticos a tener en cuanta como diferenciales son: HISTOPLASMOSIS, PIODERMA GANGRENOSO sobre todo si las lesiones fuesen dolorosas, Infecciones por MICOBACTERIAS TUBERCULOSAS Y NO TUBERCULOSAS, LEPRA, NOCARDIOSIS, ACTINOMICOSIS, BLASTOMICOSIS, CROMOBLASTOMICOSIS, ÚLCERA TROPICAL, PIAN etc.

El diagnóstico de leishmaniasis deberá ser confirmado o descartado, y para  ello  se requiere la demostración del parásito en una muestra de la úlcera  que deberá ser sometida a histología, cultivo o análisis molecular mediante reacción en cadena de la polimerasa (PCR). Para maximizar el rendimiento diagnóstico, idealmente se justifican las tres pruebas diagnósticas en la muestra inicial si es posible. Si no se pueden realizar todas las pruebas, entonces la histología y la PCR pueden proporcionar información suficiente. Es importante tener en cuenta algunos recaudos para la recolección de muestras, las cuales deben obtenerse de las zonas que parezcan más activas y ulcerativas, y en loposible sin evidencia de infección secundaria. La lesión debe limpiarse suavemente con agua y jabón o povidona yodada y luego lavarse con solución salina ; se debe evitar el yodo residual y/o el etanol si se planea un cultivo. Retirar cualquier escara hiperqueratósica. La base y los márgenes de las lesiones ulcerativas deben rasparse suavemente con una hoja de bisturí o lanceta estéril o cepillarse con un cepillo de citología. La biopsia de piel debe ser del espesor completo (4 a 5 mm) ya  que esto permite evaluar la histología y la respuesta celular; también se puede enviar para cultivo para evaluar leishmaniasis, micobacterias acidorresistentes y hongos.

El tratamiento, obviamente dependerá del diagnóstico final del cuadro, y para ello existen guías que tienen en cuenta diferentes elementos como el nivel de las lesiones, su distribución, afectación o no de mucosas, obviamente edad antecedentes etcétera.