Un colega de Argentina envió esta imagen con el
siguiente texto:
Buenos días Juan Pedro, te envío esta imagen de la uña
de un paciente/amigo que me envía por mensaje. No sé ningún otro dato del caso.
¿A qué especialidad te parece que lo derive el caso?
Opinión: Lo que se observa es ONICOMADESIS, en el dedo medio. El
lecho ungueal proximal desnudo, presenta un surco longitudinal en la línea
media, que amerita estudiar la zona del pliegue ungueal proximal. No se ve todavía regeneración de uña nueva de
buena calidad. La onicomadesis consiste en el desprendimiento de la placa
ungueal del pliegue ungueal proximal por un surco transversal de espesor completo
que literalmente “corta la uña”, como resultado
de una interrupción temporal o no, de la
formación de la placa ungueal. Se podría
decir que la onicomadesis es un grado extremo de una línea de Beau. La grave
lesión de la matriz ungueal puede obedecer a diversas causas que incluyen:
trauma (por ejemplo por manicuría,
onicotilomanía, golpes de intensidad variada en la zona de la matriz sobre todo
de carácter repetitivo, presión), dermatitis, paroniquia, drogas (retinoides,
quimioterápicos, infecciones virales (enterovirus, parecovirus, síndrome de
manos pies y boca etc), pénfigo, síndrome de Stevens-Johnsons, enfermedad de
Kawasaki etc. También se han reportado casos familiares de onicomadesis. El diagnóstico
de la onicomadesis es eminentemente clínico, y es fundamental realizar una
exhaustiva historia clínica. Interrogar sobre factores traumáticos a nivel de
la matriz ungueal, sobre todo en casos como este que parece afectar un solo
dedo (no sabemos cómo está la otra mano), ya que uno esperaría que si la causa
es sistémica como cualquier enfermedad infecciosa bacteriana o viral, o de otro
tipo, la afectación debería incluir más dedos
y no solo uno, que obliga a descartar causas locales.
El tratamiento obviamente reside en corregir la causa
y esperar a que la matriz ungueal haga su trabajo con la formación de una placa
ungueal nueva y sana. Para eso debemos asegurarnos que no persistan los
factores que originaron el proceso, y lógicamente manteniendo limpia la zona
para dar el marco adecuado a la regeneración ungueal que en en condiciones
normales se producirá entre 6 y 12 semanas. Si la matriz ungueal ha sufrido un
daño severo e irreversible, esto puede dar lugar a una distrofia ungueal permanente