Dr. Disculpe la hora, le escribe Aurelio Pizarro
médico en Naranjal, Guayas, Ecuador. Voy a enviarle una imagen de un caso que
se me ha presentado en mi año rural.
Dr. Aurelio Fernando Pizarro Astudillo.
Guayas. Ecuador.
Opinión: Existe un trayecto serpiginoso y eritematoso
en el antebrazo del niño que tiene el aspecto típico de LARVA MIGRANS CUTANEA
(LMC). Se trata de un síndrome clínico que ocurre con mayor frecuencia como
resultado de una infección humana con larvas filariformes de anquilostomas del
perro o del gato, Ancylostoma braziliense o Ancylostoma caninum, aunque también
puede ser causada por larvas de otros parásitos animales que no son parásitos
humanos naturales, especialmente en países tropicales y subtropicales del
sudeste asiático, África, Sudamérica, el Caribe y las partes sudorientales de
los Estados Unidos. Las larvas se encuentran en playas arenosas, en cajas de
arena, debajo de las viviendas y en huertos y los niños son la población más
comúnmente afectada. Las larvas penetran la piel y son transportadas a través
de los vasos sanguíneos hasta los pulmones, donde penetran en los alvéolos
pulmonares, ascienden por el árbol bronquial hasta la faringe y son tragadas. Los seres humanos pueden infectarse cuando
las larvas filariformes del suelo penetran parcialmente la piel. Las larvas de
la mayoría de las especies no pueden madurar dentro del huésped humano, ya que
los seres humanos son huéspedes intermediarios accidentales. Las larvas migran
dentro de la epidermis, carecen de la colagenasa necesaria para atravesar la membrana
basal de los vasos, y por lo tanto,
producen una reacción inflamatoria a lo largo del tracto cutáneo de su
migración, que puede continuar durante semanas. Generalmente las extremidades inferiores
son las más comúnmente afectadas, así como las nalgas y la región anogenital. El
tronco y las extremidades superiores se afectan menos. Las larvas migran a una
velocidad de varios milímetros (hasta unos pocos centímetros) por día. Las
lesiones tienen aproximadamente 3 mm de ancho y pueden tener hasta 15 a 20 mm
de longitud, y la larva propiamente dicha suele estar ubicada de 1 a 2 cm por
delante de la erupción. Por lo general, hay una a tres lesiones presentes. Las
lesiones serpiginosas suelen desarrollarse de dos a seis días después de la
exposición, pero pueden aparecer semanas o incluso muchos meses después, a
veces después del regreso de un viaje con un tiempo medio de aparición de 5 a
16 días. A veces son lesiones vesículo ampollosas y caso siempre muy
pruriginosas, y se resuelven espontáneamente incluso en ausencia de terapia
específica en dos a ocho semanas, aunque se ha informado de una mayor duración
de la infección y que, además, los síntomas cutáneos pueden reaparecer días o
meses después. El diagnóstico es clínico
epidemiológico, y los pacientes infectados suelen tener el antecedente de
exposición a suelo o arena contaminados (caminar descalzos o acostarse sobre la
arena) y la característica lesión serpiginosa en la piel. La eosisofilia es
poco frecuente. El diagnóstico diferencial puede hacerse con la LARVA CURRENS,
de la ESTRONGILOIDIASIS, que se diferencia por su componente urticariano y la
rapidez de su migración (puede progresar aproximadamente 1 cm en cinco minutos
y de 5 a 15 cm por hora!!!). La GNATOSTOMIASIS, la LOIASIS, DRACUNCULOSIS
PARAGONIMIASIS y la FASCIOLIASIS. En cuanto al tratamiento, la terapia
antihelmíntica es útil para aliviar los síntomas y reducir la probabilidad de
sobreinfección bacteriana. Las opciones de tratamiento incluyen ivermectina o
albendazol . El tratamiento preferido es ivermectina (200 mcg/kg por vía oral
una vez al día durante uno o dos días). Una dosis única de ivermectina produce
tasas de curación del 94 al 100 por ciento.