El frotis de sangre es de gran importancia en el diagnóstico diferencial de las anemias macrocíticas. Para los pacientes en los que existe una deficiencia de vitamina B12 o ácido fólico, el frotis de sangre muestra no solo macrocitos sino también macrocitos ovalados y neutrófilos hipersegmentados (Imagen 1). Cuando la anemia es más severa, puede haber poiquilocitosis marcada, con poiquilocitos en forma de lágrima y fragmentos de glóbulos rojos. Aunque estos estados de deficiencia ahora se reconocen generalmente sobre la base de análisis de vitamina B12 y ácido fólico, el frotis de sangre sigue siendo importante por dos razones. En primer lugar, permite un diagnóstico provisional rápido y el inicio del tratamiento adecuado en pacientes con anemia grave mientras se esperan los resultados de las pruebas. En segundo lugar, ocasionalmente hay pacientes con una deficiencia de vitamina B12 clínicamente significativa a pesar de un resultado normal del ensayo. Esta discrepancia ocurre porque gran parte de la vitamina B12 que se mide en el ensayo se une a la haptocorrina, mientras que la vitamina B12 funcional, que se une a la transcobalamina, contribuye mucho menos al ensayo de B12 total.
De manera similar, la deficiencia aguda de ácido
fólico a veces se desarrolla en pacientes a pesar de que el nivel total de
folato de glóbulos rojos permanece normal. La observación de un frotis de
sangre que es típico de la anemia megaloblástica a pesar de los análisis normales
es una indicación de que se necesitan más investigaciones y un ensayo de
tratamiento. La enfermedad hepática y el consumo excesivo de etanol son causas
comunes de macrocitosis, y el frotis de sangre suele mostrar macrócitos
redondos en lugar de ovalados y carece de neutrófilos hipersegmentados; también
pueden estar presentes células diana y estomatocitos.
En pacientes de edad avanzada, los síndromes
mielodisplásicos son una causa importante de macrocitosis.
Las características del frotis de sangre que pueden
apuntar al diagnóstico incluyen neutrófilos hipogranulares o hipolobulados,
células blásticas (Fig. 2), plaquetas gigantes o hipogranulares, cuerpos de
Pappenheimer y la presencia de una población menor de células microcíticas
hipocrómicas, lo que lleva a un frotis dimórfico ( Fig. 3). La anemia
macrocítica resultante de la anemia diseritropoyética congénita también produce
un frotis de sangre característico, con poiquilocitosis llamativa (Fig. 4).
Cuando la macrocitosis es el resultado de hemólisis o pérdida de sangre
reciente, el frotis de sangre muestra policromasia, que resulta de un aumento
en el recuento de reticulocitos.
Imagen 1. En el frotis de sangre se muestra anemia
perniciosa, con anisocitosis, macrocitosis y neutrófilo hipersegmentado.
De manera similar, la deficiencia aguda de ácido
fólico a veces se desarrolla en pacientes a pesar de que el nivel total de
folato de glóbulos rojos permanece normal. La observación de un frotis de
sangre que es típico de la anemia megaloblástica a pesar de los análisis
normales es una indicación de que se necesitan más investigaciones y un ensayo
de tratamiento. La enfermedad hepática y el consumo excesivo de etanol son
causas comunes de macrocitosis, y el frotis de sangre suele mostrar macrócitos
redondos en lugar de ovalados y carece de neutrófilos hipersegmentados; también
pueden estar presentes células diana y estomatocitos.
En pacientes de edad avanzada, los síndromes
mielodisplásicos son una causa importante de macrocitosis.
Las características del frotis de sangre que pueden
apuntar al diagnóstico incluyen neutrófilos hipogranulares o hipolobulados,
células blásticas (Fig. 2), plaquetas gigantes o hipogranulares, cuerpos de
Pappenheimer y la presencia de una población menor de células microcíticas
hipocrómicas, lo que lleva a un frotis dimórfico ( Fig. 3). La anemia
macrocítica resultante de la anemia diseritropoyética congénita también produce
un frotis de sangre característico, con poiquilocitosis llamativa (Fig. 4).
Cuando la macrocitosis es el resultado de hemólisis o pérdida de sangre
reciente, el frotis de sangre muestra policromasia, que resulta de un aumento
en el recuento de reticulocitos.
Imagen 2 Síndrome mielodisplásico, con una célula
blástica (flecha) y dos neutrófilos que tienen núcleos hipolobulados, uno de
los cuales es binucleado y el otro hipogranular.
Imagen 3. Síndrome mielodisplásico con anisocitosis,
poiquilocitosis, macrocitos, estomatocitos y un eritrocito con cuerpos de
Pappenheimer prominentes (flecha); el frotis también es dimórfico y muestra
tanto macrocitos bien hemoglobinizados como microcitos hipocrómicos.
Imagen 4 muestra anemia diseritropoyética congénita
tipo 1, con anisocitosis, poiquilocitosis y algunos macrocitos. Todos los
especímenes se tiñeron con la tinción de May-Grünwald-Giemsa.
Fuente:
Diagnosis from the Blood Smear
Barbara J. Bain, F.R.A.C.P., F.R.C.Path
NEJM 2022